Las ciudades son centros de gran riqueza patrimonial. Los parques, los edificios o las esculturas, son emblemas y símbolos representativos de las mismas.
El paso del tiempo y el uso de dicho patrimonio produce un desgaste considerable en su aspecto.
Nuestra empresa se encarga de la restauración y mantenimiento para la recuperación de dicho patrimonio, como balcones, esculturas, vallas y otros elementos decorativos. Contamos con un equipo de profesionales preparado para evaluar las necesidades específicas de cada proyecto.
La Fuente Canaletas, la Fuente Wallace, farolas ornamentales, la valla perimetral del Parque de la Ciudadela, los palcos del Gran Teatro del Liceo, las Jardineras Dragón del Paseo San Juan, el antiguo Hotel Montecarlo de las Ramblas, los balcones y elementos decorativos de la Casa Burés o recientemente detalles ornamentales de la Casa Oller son actuacions que hemos realizado en Barcelona.
El impacto ambiental, como la polución y el clima, así como el mal uso de edificios y distintos elementos que componen el mobiliairo urbano, producen el deterioro en nuestro patrimonio.
Trabajamos para reparar y embellecer nuestro legado histórico con distintas tecnologias, como el hierro fundido, el bronce y la forja.
Barrotes, barandas, adorno de fachadas, farolas ornamentales y diferentes detalles en interiores de edificios catalogados e históricos avalan nuestro Trabajo.
Nuestra empresa de más de 100 años de existencia nos da la experiencia y el saber hacer para reconstruir distintos elementos inexistentes o deteriorados. También el modelaje acumulado durante estos años de actividad constituyen un gran valor que apreciamos y cuidamos.
Como proveedores de entidades públicas como ayuntamientos, así como constructoras. Trabajando estrechamente con despachos de arquitectura y direcciones facultativas de distintos proyectos, hemos alcanzado una forma eficaz de trabajar, valorando en cada momento distintas soluciones. Por ello ofrecemos soluciones técnicas que puedan reduir costes excesivos, siendo a la vez muy respectuosos con el resultado final, sin dejar de lado el entorno y el medio ambiente. Reduciendo, durante el proceso, emisiones y optando por las soluciones más responsables.
Proteger los entornos urbanos histórico es una demostración de respeto a nuestra cultura. Nuestras ciudades han de mirar al futuro sin olvidar su pasado, su historia. Así podremos seguir disfrutando de todo lo que nos ofrece nuestro patrimonio.
